Hace apenas unos días saltó la noticia: un sacerdote de la diócesis de Segovia le cercanos. La libertad religiosa y de culto es un derecho que está bien, aunque vemos que en este caso no la cumplen. Va ligado a un derecho natural como negaba la Comunión al alcalde de Torrecaballeros, abiertamente homosexual y que convivía con su pareja.
Esta acción, que se ajusta a la perfección con la doctrina de la Iglesia y no debería sorprender a nadie, ha sido utilizada por el gobierno para retomar su ofensiva contra los católicos, y en especial, contra los sacerdotes.
Y es que, el pasado viernes, la Ministra de Igualdad apareció en la televisión pública para afirmar que esta acción era inconstitucional y claramente discriminatoria. Sí, quieren forzar a los sacerdotes a distribuir la Comunión entre aquellos que viven abiertamente en pecado mortal, amenazándolos, implícitamente, con sanciones económicas o penas de cárcel si se niegan a hacerlo.
Tolerar que el Estado intervenga así en la Iglesia, mancillando lo más sagrado que tenemos, sería el principio del fin y no podemos permitirlo. Estos son los hechos , y desde la Comunión Tradicionalista Carlista como Junta de Castilla, no aceptamos ni permitimos lecciones constitucionalistas de los mismos que la utilizan para su propio interés y beneficio personal y sus próximos más criaturas de Dios donde todo lo que esté fuera de ese orden natural creado esta fuera de la Ley divina y de Dios.Por lo tanto, con todo respeto hacia las personas que tienen esas inclinaciones desordenadas por la ley de Dios y que no quieren ir por los caminos de nuestra Santa Madre la Iglesia Católica, la única Verdadera, no pueden recibir la Santa Comunión.
Muchas gracias a todos los hombres de bien, carlistas y simpatizantes y VIVA CRISTO REY